Una dura prueba

Hay momentos en la vida diaria que aquello que anhelamos no se da de la forma que pensamos, es decir, Dios en su palabra promete que aquel que cumple su voluntad y lo obedece, seríamos bendecidos. Sino mira lo que dice en Deuteronomio:

Bendiciones por la obediencia

28 »Si realmente escuchas al Señor tu Dios, y cumples fielmente todos estos mandamientos que hoy te ordeno, el Señor tu Dios te pondrá por encima de todas las naciones de la tierra. 2 Si obedeces al Señor tu Dios, todas estas bendiciones vendrán sobre ti y te acompañarán siempre:

3 

»Bendito serás en la ciudad,

    y bendito en el campo

4 

»Benditos serán el fruto de tu vientre,

    tus cosechas, las crías de tu ganado,

los terneritos de tus manadas

    y los corderitos de tus rebaños.

5 

»Benditas serán tu canasta

    y tu mesa de amasar.

6 

»Bendito serás en el hogar,

    y bendito en el camino.(tu puedes continuar leyendo hasta el versiculo 12)

Por lo tanto, es de esperarse que si tratas de cumplir con la voluntad de Dios, tu situación vaya medianamente bien; pero a veces ocurre algo muy diferente, es como si hubiera hambre en la tierra prometida. ¿Te acuerdas cuando Dios le dijo al pueblo de Israel que atraviesen el desierto para ir a esa tierra que él le habia preparado, tierra que fluye leche y miel, territorio de abundancia?. 

En Génesis 12 relata que Abram, según lo ordenado por Dios, dejó el lugar dónde habitaba para trasladarse hacia aquella tierra prometida, sin embargo el versiculo 10 describe:

Y hubo hambre en la tierra; y Abram descendió a Egipto para pasar allí un tiempo, porque el hambre era severa en la tierra.

¿Hambre en la tierra prometida? en efecto asi relata este capítulo, y es un momento dónde la fe de Abram es probada; pero el comete un gran error que le traerá posteriomente muchas tristezas, desciende a Egipto sin consultar a Dios. No permaneció en aquella Tierra prometida.

Y a veces algo similar sucede con nosotros, estamos obrando según la voluntad de Dios, esforzándonos por vivir en obediencia, pero las cosas no van del todo bien como esperábamos; y es allí dónde pensamientos negativos nos hacen dudar del cuidado de nuestro Padre y nuestra fe se debilita. Si esta es tu situación, te animo a creer, a no moverte del lugar dónde Dios te colocó, y sobre todo a no dejar de obedecerlo. Estas en el lugar correcto!! no te muevas!! EL TE SOSTIENE EN SUS BRAZOS; aún cuando no veas la solución de tus problemas, tu victoria viene en camino, permance! Que Dios no se olvidó de tí.